O Caurel se muere

La construcción, la industria y los servicios en las grandes urbes cercenaron de cuajo la economía de subsistencia de los núcleos rurales más aislados de la montaña lucense. Se trataba de una economía cuyo pilar básico era el autoconsumo y la venta de los excedentes agrarios a unos precios razonables si los comparamos con los actuales. Pero todo eso se acabó. La gente se marchó a donde se producía y consumía mucho. Daba igual lo que se fabricara mientras tuviera salida en el mercado. Pero de repente se rompió un eslabón de la cadena...

Son suficientes 10 años para que muchos pueblos de O Caurel (Lugo) queden totalmente deshabitados debido a la emigración y a la escasa tasa de natalidad; a menos que... se estanque totalmente el mercado de la vivienda, se dejen de vender coches, televisores, teléfonos móviles, trajes para perros, entradas para ver fúrbol... Cuando se deje de comprar todo ello y muchas cosas más, posiblemente comprendamos cuánto valor tiene el pan, la leche, la carne, la lana para tejer la ropa y las mantas, la leña del monte para espantar el frío, el horno y el trigo... Mucho ojo con la bola de nieve haciéndose cada vez más grande cuesta abajo. Mucho ojo con los expertos y los listillos que dicen saber cómo pararla. (Fotos de Suso. Arriba, casa tradicional de Vilamor, en Folgoso do Caurel).